Ave mimada de verbal arte lima mi letra... La brevedad a mí me va.
MJ, sí que dan miedo sí. Las medusas son capaces de vaciar una playa en un santiamen. Son más eficaces que las banderas y los socorristas juntos.Un beso artista.
Sudaría de la carrera que se pegó para huir de la meduda, que dan miedico, sí.
Las vacaciones junto a la bella mar encierran su peligro, ja ja!!!Con el placer de esta sonrisa que me regalás te envío un beso
Jo, MJ. ¡Qué bueno! Roja se queda la piel al rozar una medusa. Algo de malo debían de tener las vacaciones en el mar :)Besitos.
Me encantan las medusas por su transparencia, pero no me gusta encontrármelas mientras me estoy bañando.Besos, MJ.
Pobre Manuela, menudo susto se ha llevado!!!Las medesas están bien para verlas en la tele,Bravo MJ.Besos desde el aire
NO me extraña, son preciosas pero más vale no tenerlas cerca, como para no sudar del susto, jajajaBesitos
Y es que tus palíndromos pican.Blogsaludos
Tuve la mala suerte de que una medusa me rozara la pierna y... ¡Dios! ¡Cómo duele y pica y escuece!Un abrazo, Nico.
¡Jeje! Sí, Ainhoa. Te entran unos sudores que no veas :-)Besitos.
:-)Otro para vos, Patricia.
Precisamente fue en una playa de Granada donde me topé con una. Y sí, la piel se me puso roja roja.Un beso, Sara.
Son preciosas de lejos; si se acercan no lo son tanto :-)Besotes, ATENEA.
No, no fue Manuela. La víctima fui yo :-(Gracias, Rosa.Besos.
Ten por seguro que si la hubiese visto no me habría acercado a ella.Besitos, Elysa.
¡Qué me dices! ¿Pican? Pero si son de lo más inofensivos ;-)Un abrazo, Adivín Serafín.
Sí, mejor verlas de lejos :-)Gracias, Daniel.Un beso.
Esperemos que Manuela encontrara remedio para escapar de la picadura... Si no, mal verano le espera.
Es verdad, cuanto más lejos mejor esos bichitos. Muy bueno tu trabajo.Un gran abrazo!!
No fue tan grave la cosa :-)Un beso, Goyo.
Gracias, Caly. Un placer verte de nuevo por aquí.Un abrazo.
Debió ser grande para sudarla roja... del susto :DSaludos !!
Las pequeñas también pican, Paper ;-)Besos.
Miedo dan las medusas, con lo bonitas que son... creo que su belleza es directamente proporcional al dolor de sus caricias... Manuela.. ya puedes correr o roja te vas a poner..Besos guapa.
Directamente proporcional, sí :-)Un besote.
MJ, sí que dan miedo sí. Las medusas son capaces de vaciar una playa en un santiamen. Son más eficaces que las banderas y los socorristas juntos.
ResponderEliminarUn beso artista.
Sudaría de la carrera que se pegó para huir de la meduda, que dan miedico, sí.
ResponderEliminarLas vacaciones junto a la bella mar encierran su peligro, ja ja!!!
ResponderEliminarCon el placer de esta sonrisa que me regalás te envío un beso
Jo, MJ. ¡Qué bueno! Roja se queda la piel al rozar una medusa. Algo de malo debían de tener las vacaciones en el mar :)
ResponderEliminarBesitos.
Me encantan las medusas por su transparencia, pero no me gusta encontrármelas mientras me estoy bañando.
ResponderEliminarBesos, MJ.
Pobre Manuela, menudo susto se ha llevado!!!
ResponderEliminarLas medesas están bien para verlas en la tele,
Bravo MJ.
Besos desde el aire
NO me extraña, son preciosas pero más vale no tenerlas cerca, como para no sudar del susto, jajaja
ResponderEliminarBesitos
Y es que tus palíndromos pican.
ResponderEliminarBlogsaludos
Tuve la mala suerte de que una medusa me rozara la pierna y... ¡Dios! ¡Cómo duele y pica y escuece!
ResponderEliminarUn abrazo, Nico.
¡Jeje! Sí, Ainhoa. Te entran unos sudores que no veas :-)
ResponderEliminarBesitos.
:-)
ResponderEliminarOtro para vos, Patricia.
Precisamente fue en una playa de Granada donde me topé con una. Y sí, la piel se me puso roja roja.
ResponderEliminarUn beso, Sara.
Son preciosas de lejos; si se acercan no lo son tanto :-)
ResponderEliminarBesotes, ATENEA.
No, no fue Manuela. La víctima fui yo :-(
ResponderEliminarGracias, Rosa.
Besos.
Ten por seguro que si la hubiese visto no me habría acercado a ella.
ResponderEliminarBesitos, Elysa.
¡Qué me dices! ¿Pican? Pero si son de lo más inofensivos ;-)
ResponderEliminarUn abrazo, Adivín Serafín.
Sí, mejor verlas de lejos :-)
ResponderEliminarGracias, Daniel.
Un beso.
Esperemos que Manuela encontrara remedio para escapar de la picadura... Si no, mal verano le espera.
ResponderEliminarEs verdad, cuanto más lejos mejor esos bichitos. Muy bueno tu trabajo.
ResponderEliminarUn gran abrazo!!
No fue tan grave la cosa :-)
ResponderEliminarUn beso, Goyo.
Gracias, Caly. Un placer verte de nuevo por aquí.
ResponderEliminarUn abrazo.
Debió ser grande para sudarla roja... del susto :D
ResponderEliminarSaludos !!
Las pequeñas también pican, Paper ;-)
ResponderEliminarBesos.
Miedo dan las medusas, con lo bonitas que son... creo que su belleza es directamente proporcional al dolor de sus caricias... Manuela.. ya puedes correr o roja te vas a poner..
ResponderEliminarBesos guapa.
Directamente proporcional, sí :-)
ResponderEliminarUn besote.