Ave mimada de verbal arte lima mi letra... La brevedad a mí me va.
Genial, como siempre. Ya dicen que el odio genera odio.
La palabra odio resuena en tu palíndromo suave.Blogsaludos
Ya te digo... el señor Sade, con todo lo que era...A todo esto...y valga la redundancia... mas razón que un santo... quien odio da.. no merece mas que indiferencia... tanto como daga... no se yo!Besos MJ, mi maga preferida.
No claves daga, no odiaré, MJ.Qué buena!!!Besos desde el aire
El Señor Sade ha oído bien y ya sabe lo que le espera, así que cambie el odio por amor y se salvará de la temible daga.Buenísimo!!!Besos, MJ.
Está avisado, y es mejor que tome en serie la palabra de una experta en palabras como vos.Abrazos admirados
¿Y tu crees MJ que este personaje no se sentirá aún más atraído por esta invitación a la acción?. Un beso.
Lamentablemente así es, Ainhoa.Un beso.
¿Qué es lo que te suena suave, la palabra odio o todo el palíndromo? ;-)Un abrazo, Adivín.
Yo creo que al Marqués no le asustaba nada ;-)Un besote, Gala.
¿Odiar tú, querida Rosa? Déjame que lo dude :-)Un besazo.
Supongo que el sr. Sade amaba a su manera.Un beso, ATENEA.
¡Jaja! A saber lo que diría si hubiera podido leer este palíndromo.Un beso, Patricia.
:-) Yo también sospecho algo parecido.Gracias, Daniel.Un abrazo.
Teniendo en cuenta que el término 'sadismo' procede de su nombre, podríamos esperar cualquier cosa.Un abrazo, Karras.
Oído,odiodaré dagasi me das miseria...Un una ocurrencia repentina al leerte me ha dado.je,je,Mil perdones y muchos besicos salados
El odio con odio se devuelve...Qué buen palíndromo, MJ. Te superas. Besos.
Estupenda ocurrencia, Cabopá :-)Un beso.
Y amor con amor se paga, Sara.Me alegra verte de nuevo :-)Un besote.
El Sr. Sade yo creo que ha oído, aunque dado que se le relaciona con el sadismo, no sé, no sé...Besitos
¿Y quién lo sabe? ;-)Besotes, Elysa.
Ufff, andas dura eh??? jajaUn abrazo MJ!!!!
¡Jajaja! ¡¡Mucho!!Abrazos, Suc.
Ay, morí con esa daga...No sin antes coincidir con Patricia: Sos una experta en palabras.Saludos muchos, vine desde el blog de Adivín.
Creo que lo de 'experta en palabras' me viene un poco grande. Simplemente juego con ellas :-)Gracias por acercarte hasta aquí, Luna. Vuelve cuando gustes.Un beso.
MJ, ese Sade parece que era perverso, se merecía ese final.Un abrazo.
Él se lo buscó, sí. :-)Besos.
Genial, como siempre. Ya dicen que el odio genera odio.
ResponderEliminarLa palabra odio resuena en tu palíndromo suave.
ResponderEliminarBlogsaludos
Ya te digo... el señor Sade, con todo lo que era...
ResponderEliminarA todo esto...y valga la redundancia... mas razón que un santo... quien odio da.. no merece mas que indiferencia... tanto como daga... no se yo!
Besos MJ, mi maga preferida.
No claves daga, no odiaré, MJ.
ResponderEliminarQué buena!!!
Besos desde el aire
El Señor Sade ha oído bien y ya sabe lo que le espera, así que cambie el odio por amor y se salvará de la temible daga.
ResponderEliminarBuenísimo!!!
Besos, MJ.
Está avisado, y es mejor que tome en serie la palabra de una experta en palabras como vos.
ResponderEliminarAbrazos admirados
¿Y tu crees MJ que este personaje no se sentirá aún más atraído por esta invitación a la acción?. Un beso.
ResponderEliminarLamentablemente así es, Ainhoa.
ResponderEliminarUn beso.
¿Qué es lo que te suena suave, la palabra odio o todo el palíndromo? ;-)
ResponderEliminarUn abrazo, Adivín.
Yo creo que al Marqués no le asustaba nada ;-)
ResponderEliminarUn besote, Gala.
¿Odiar tú, querida Rosa? Déjame que lo dude :-)
ResponderEliminarUn besazo.
Supongo que el sr. Sade amaba a su manera.
ResponderEliminarUn beso, ATENEA.
¡Jaja! A saber lo que diría si hubiera podido leer este palíndromo.
ResponderEliminarUn beso, Patricia.
:-) Yo también sospecho algo parecido.
ResponderEliminarGracias, Daniel.
Un abrazo.
Teniendo en cuenta que el término 'sadismo' procede de su nombre, podríamos esperar cualquier cosa.
ResponderEliminarUn abrazo, Karras.
Oído,odio
ResponderEliminardaré daga
si me das
miseria...Un una ocurrencia repentina al leerte me ha dado.je,je,
Mil perdones y muchos besicos salados
El odio con odio se devuelve...
ResponderEliminarQué buen palíndromo, MJ. Te superas. Besos.
Estupenda ocurrencia, Cabopá :-)
ResponderEliminarUn beso.
Y amor con amor se paga, Sara.
ResponderEliminarMe alegra verte de nuevo :-)
Un besote.
El Sr. Sade yo creo que ha oído, aunque dado que se le relaciona con el sadismo, no sé, no sé...
ResponderEliminarBesitos
¿Y quién lo sabe? ;-)
ResponderEliminarBesotes, Elysa.
Ufff, andas dura eh??? jaja
ResponderEliminarUn abrazo MJ!!!!
¡Jajaja! ¡¡Mucho!!
ResponderEliminarAbrazos, Suc.
Ay, morí con esa daga...
ResponderEliminarNo sin antes coincidir con Patricia: Sos una experta en palabras.
Saludos muchos, vine desde el blog de Adivín.
Creo que lo de 'experta en palabras' me viene un poco grande. Simplemente juego con ellas :-)
ResponderEliminarGracias por acercarte hasta aquí, Luna. Vuelve cuando gustes.
Un beso.
MJ, ese Sade parece que era perverso, se merecía ese final.
ResponderEliminarUn abrazo.
Él se lo buscó, sí. :-)
ResponderEliminarBesos.