Este palíndromo reluce como el oro. Tienes tanto arte que todo encaja a la perfección. Hasta es posible que las cuentas de la lechera se hagan realidad y el cántaro no se derrame. Besos, MJ.
Ojalá el cuento de la lechera tenga por fin un final feliz. Siempre me dio mucha pena comprobar que todas sus ilusiones (como el cántaro) se hacían añicos.
Ojalá que no sea la vaca de la famosa fábula de la lechera. Se desperdiciar+ia, ja ja.
ResponderEliminarSos una grande, como siempre.
Besos
Ella no sé, pero tú sacas cualquier cosa de tus palabras. Un abrazote
ResponderEliminarEste palíndromo reluce como el oro. Tienes tanto arte que todo encaja a la perfección. Hasta es posible que las cuentas de la lechera se hagan realidad y el cántaro no se derrame.
ResponderEliminarBesos, MJ.
Jajaja, tiene cara graciosa y encima saca oro, como tú lo haces de las palabras.
ResponderEliminarBesitos
MJ, la leche de la vaca para el granjero es oro y para este que lee tus palindromos son plata de ley.
ResponderEliminarMuy buenos, éste incluido.
Un abrazo Artista.
Esperemos que las vacas flacas con las que lidiamos, también sean capaces de dar oro...
ResponderEliminarSaludos dorados, Mj.
Este palíndromo lo siento muy de casa, muy asturiano, solo le falta mugir.
ResponderEliminarBlogsaludos
Esperemos que esta vez todo le salga bien a la lechera :-)
ResponderEliminarUn abrazo, Patricia.
¡Son tan agradecidas las palabras!
ResponderEliminarYo también ¿eh? :-)
Un abrazo, Paloma.
Ojalá el cuento de la lechera tenga por fin un final feliz. Siempre me dio mucha pena comprobar que todas sus ilusiones (como el cántaro) se hacían añicos.
ResponderEliminarUn besazo, ATENEA.
Es una vaca muy salada ¿verdad, Elysa? :-)
ResponderEliminarUn beso, guapa.
Espero que nunca te canses de leer mis palíndromos, Nicolás.
ResponderEliminarMe encanta verte por aquí :-)
Un abrazo.
Va a ser muy complicado, Dyhego, pero no perdamos la esperanza. A lo mejor mañana nos toca la lotería y... :-)
ResponderEliminarAbrazos.
Si hay que mugir se muge, Nel
ResponderEliminar¡Muuuuuuuuuchas gracias, guaje!
¿Te sonó asturianín? ;-)
Un abrazo.
Jejeje, ella sacará oro. Pero tú eres capaz de sacar palíndromos de un botijo.
ResponderEliminarTe deseo unos días llenos de sonrisas y besos.
Los míos te los mando desde el aire
Hay ahí un ejecutivo de la banca hablando, seguro :D
ResponderEliminarUn abrazo bien fuerte y un deseo: que el 2012 te sea propicio y, cómo no, que yo pueda seguir disfrutando de tus palíndromos.
Y besos esos esos :)
¡Jajaja! ¡Qué linda eres!
ResponderEliminar¡Felices Fiestas!
Un montón de besos.
:-)
ResponderEliminarLo mismo para ti, Ximo.
Felices Fiestas y Feliz Año Nuevo cargado de trabajo para ti.
Un fuerte abrazo azo azo.
Que vaca tan salada. ¿Tambien da leche merengada?..........Sería el remate:-) Besos mona.
ResponderEliminarPues vaya vaca tan resalá
ResponderEliminarTendrá una gran cola la vaca
a la espera de la leche dorada...je,je...
Tus palíndromos siempre me producen una sonrisa.
Besicos y felices todos los días del año.
No, esta vaca no da leche merengada porque a mí no me gusta y punto ;-)
ResponderEliminarUn besazo, Emma.
No está mal que miremos la vida con una sonrisa. Si contribuyo un poquito a ello, me siento afortunada y feliz.
ResponderEliminar¡Felices Fiestas, Cabopá!
Un abrazo.