MJ, tiene buen color esas perdices, aunque yo creo que también me iría, nunca he sido de comer pajarillos. Como siempre, un gran palíndromo. Un abrazo Artista.
Ups, pues no, definitivamente me voy... a mi es que esto de las perdices no me va ni en los cuentos... Nadie nos ha contado que pasa despues de que se comen las perdices.. jejeje, posiblemente terminarán en divorcio..jajajaja
Yo me apunto. Si él se va, no importa porque así tocaremos a más. Él se lo pierde. Me gustan las perdices y las codornices también. Muy bueno, como siempre. Además en plena temporada de caza ¿no? Besos, MJ.
Él se lo pierde...porque tu guiso aparece apetecible y tus palabras la mejor invitación.
ResponderEliminarUn abrazote grande.
MJ, tiene buen color esas perdices, aunque yo creo que también me iría, nunca he sido de comer pajarillos.
ResponderEliminarComo siempre, un gran palíndromo.
Un abrazo Artista.
Qué rico tu palíndromo de hoy!
ResponderEliminarBesos.
... y seremos felices comiendo perdices y leyendo tus palindromos.
ResponderEliminarUps, pues no, definitivamente me voy... a mi es que esto de las perdices no me va ni en los cuentos...
ResponderEliminarNadie nos ha contado que pasa despues de que se comen las perdices.. jejeje, posiblemente terminarán en divorcio..jajajaja
Besitos mediterráneos.
A estas horas, y yo sin comer.
ResponderEliminarYo creo que al final seguro que no se va :)
ResponderEliminarMuy bueno María José.
(para chuparse los dedos) :)
Un abrazo
Sería un tonto si se fuera: se ven tan apetitosas!
ResponderEliminarTu trabajo no deja de asombrarme,MJ
Un abrazo
Yo no me voy, pero si no te importa prefiero huevos fritos...
ResponderEliminarBesos desde el aire
Y las tuyas, un regalo para mis ojos.
ResponderEliminarGracias, Paloma.
Un abrazote.
Hombre Nicolás, ya que has venido hasta aquí, no te vas a ir sin comer. Te prepararé otra cosa :-)
ResponderEliminarUn abrazo.
Sírvete tú misma, Sara.
ResponderEliminarUn besote.
Alcudia: Perdices no tendré todos los días, pero siempre que vengas serás bien recibido :-)
ResponderEliminarUn abrazo.
Gala: Si no te gustan las perdices te preparo otra cosa, pero no te vayas así, mujer ;-)
ResponderEliminarBesazos.
¿Y a qué esperas, Tor?
ResponderEliminarBesicos.
Ximo: Eso creo yo, en cuanto le eche un vistazo a la cazuela... :-)
ResponderEliminarUn abrazote.
Patricia: Un tonto muy tonto :-)
ResponderEliminarBesotes.
Sus deseos son órdenes, doña Rosa.
ResponderEliminar¡¡Una de huevos fritos con patatas!!:-)
Un beso, guapa.
No te preocupes, él sí que era una ave de cuidado.
ResponderEliminarBlogsaludos
Él o ella se lo pierde, por supuesto :-)
ResponderEliminarUn abrazo, Nel.
jejejeje oooo eso me hacia mi abuelita antes hummmmmmmm!!!!!
ResponderEliminarNo soy muy de perdices, pero sí de ser felices. Me quedo con eso.
ResponderEliminarYo me apunto. Si él se va, no importa porque así tocaremos a más. Él se lo pierde.
ResponderEliminarMe gustan las perdices y las codornices también.
Muy bueno, como siempre. Además en plena temporada de caza ¿no?
Besos, MJ.
En fin, no soy yo mucho de aves, pero buena pinta tienen, igual que tu palíndromo...
ResponderEliminarBesitos
Gratos recuerdos ¿verdad? :-)
ResponderEliminarUn beso, Chris.
Mira qué listo, Goyo ;-)
ResponderEliminarUn beso.
Plena temporada de caza, ATENEA.
ResponderEliminarInvitada estás a degustar estas perdices :-)
Un abrazo.
Otra cosa te pondré, Elysa. No problem! :-)
ResponderEliminarBesitos.
Bueno pues el/ella se lo pierde porque tiene un aspecto buenisimo. Me refiero al palindromo jajaj. Un beso
ResponderEliminar¡Ah! :-)
ResponderEliminarGracias, Karras.
Un besito.
¡MJ, con la comida no se juega!, te hubiera dicho mi madre. Buen provecho nos das con tus ocurrencias.
ResponderEliminarY tiene razón tu madre, Ximens.
ResponderEliminarYo no juego con la comida sino con las palabras ;-)
Un abrazo.