Uyyyyyyyyyyy ! La señorita Rotenmeyer, siempre tan estirada. Bravo por Heidy! Una pizca de rebeldía no está mal. Maravilloso el palíndromo. Un beso, guapa.
Efectivamente, Daniel. La construcción de un palíndromo está llena de sorpresas. Es parte de la magia que nos ofrecen las palabras :-) Un placer verte de nuevo.
Uyyyyyyyyyyy ! La señorita Rotenmeyer, siempre tan estirada. Bravo por Heidy! Una pizca de rebeldía no está mal.
ResponderEliminarMaravilloso el palíndromo.
Un beso, guapa.
¡me encanta! Menos riñas y más diálogo :)
ResponderEliminarBesos.
Ya lo creo que es con causa jeje :)
ResponderEliminarQue tiña su saya, pegue media vuelta y cumpla con su destino!!!
ResponderEliminarUn montón de besos
Normal, si la que riñe es la señorita Rotenmeyer es para teñir la saya del susto.
ResponderEliminarBesitos
Que no la tiña... Mejor quemarla directamente, ya que se pone rebelde!!!
ResponderEliminarMuy bueno.
Saludos desde el aire "Maga"
La señorita Rotenmeyer! cuantos recuerdos de mi niñez!
ResponderEliminarJa ja, qué recuerdos... Ya era hora de que se rebelara un poco.
ResponderEliminarMuy bueno. Un saludo.
ATENEA: La dócil Heidi se cansó de acatar las órdenes de la despiadada Rotenmeyer.
ResponderEliminarGracias, guapa.
Un beso.
Estoy de acuerdo contigo, Ximo, el diálogo es fundamental para empezar a entenderse.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ainhoa, desde luego que tiene razones suficientes :-)
ResponderEliminarUn beso.
Patricia, ¡ea! ¡que viva la revolución! ;-)
ResponderEliminarBesos.
Elysa, creo que Heidi le perdió el miedo a su déspota institutriz :-)
ResponderEliminarBesotes.
Rosa, es una rebelión en toda regla :-)
ResponderEliminarUn besote.
Guille, jeje! ¡Qué tiempos aquellos ¿verdad?
ResponderEliminarUn beso.
Sara, sí, creo que ya iba siendo hora :-)
ResponderEliminarBesos.
Entrañable, por la evocación de la imagen a la serie animada... (que a mí me pilló ya pelín mayorcico, jajaja)
ResponderEliminarBueno, pero seguro que la mirabas de reojo o de refilón ;-)
ResponderEliminarUn abrazo, Luis
Efectivamente, Daniel. La construcción de un palíndromo está llena de sorpresas. Es parte de la magia que nos ofrecen las palabras :-)
ResponderEliminarUn placer verte de nuevo.
Un abrazo.